El mecanismo contribuirá a conocer las incertidumbres en lo que respecta al papel que el océano, la biosfera terrestre y las zonas de permafrost desempeñan en el ciclo del carbono.
Ciento noventa y tres países han aprobado por unanimidad la creación de un mecanismo mundial de seguimiento de los gases de efecto invernadero, anunció el miércoles la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Esta decisión histórica se produce en un momento en que las concentraciones de gases de efecto invernadero que atrapan el calor se encuentran en niveles récord, «más altos que en cualquier otro momento de los últimos 800.000 años», advirtió la agencia de la ONU.
Desde la Tierra y el espacio
El nuevo mecanismo Vigilancia Mundial de los Gases de Efecto Invernadero combinará observaciones desde la Tierra y desde el espacio con modelizaciones para colmar lagunas de información críticas. Además, aprovechará la experiencia de la Organización en la coordinación de la colaboración internacional para la predicción meteorológica.
La agencia afirmó que el intercambio de datos será «libre y sin restricciones», en apoyo del Acuerdo de París sobre el cambio climático.
Entre 1990 y 2021, el efecto de calentamiento de nuestro clima por los principales gases de efecto invernadero, dióxido de carbono, metano y óxido nitroso, aumentó casi un 50%.
«Sabemos por nuestras mediciones que las concentraciones de gases de efecto invernadero están en niveles récord», dijo el secretario general de la OMM.
Petteri Taalas explicó que «el aumento de los niveles de dióxido de carbono de 2020 a 2021 fue superior a la tasa media de crecimiento de la última década y el metano experimentó el mayor salto interanual desde que comenzaron las mediciones».
Queda mucho por aprender
«Pero todavía hay incertidumbres, sobre todo en lo que respecta al papel que el océano, la biosfera terrestre y las zonas de permafrost desempeñan en el ciclo del carbono», afirmó Taalas.
«Por tanto, necesitamos llevar a cabo un seguimiento de los gases de efecto invernadero dentro de un marco integrado del Sistema Tierra para poder contabilizar las fuentes y sumideros naturales, tanto tal y como funcionan actualmente como tal y como cambiarán como consecuencia de un clima cambiante. Esto proporcionará información y apoyo vitales para la aplicación del Acuerdo de París», afirmó.
Lars Peter Riishojgaard, director adjunto de Infraestructuras de la OMM, dijo que la «decisión de la agencia meteorológica sobre el reto generacional de la mitigación del cambio climático es un paso histórico».
«La vigilancia mundial coordinada internacionalmente de los gases de efecto invernadero, abierta a todos y que funciona con arreglo a la política de la OMM de intercambio de datos gratuito y sin restricciones, proporcionará a las Partes de la Secretaría de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático información valiosa, oportuna y fidedigna sobre los flujos de gases de efecto invernadero, que les ayudará en sus esfuerzos por mitigar el cambio climático», añadió.
Riishojgaard afirmó que el nuevo proyecto de vigilancia cuenta con un «gran apoyo de la comunidad científica y el sector privado».
Fuente: ONU